5 Cosas que alteraron mi cerebro de 'El Niño y la Garza' de Hayao Miyazaki

    Es que esta es la prueba de que la imaginación de Hayao Miyazaki no tiene límites

    En 2022 Guillermo del Toro se llevó el Óscar por Mejor Película Animada gracias a 'Pinocchio'

    Durante su discurso, el director aprovechó para recordarnos que la animación no es un género exclusivo para niños, sino que en él hay un medio más para contar historias para grandes y pequeños.

    ¿Y quién sabe mejor esto que Hayao Miyazaki?

    Con películas como 'El Viaje de Chihiro' (ganadora del Óscar a Mejor Película Animada), 'Mi Vecino Totoro', 'El Increíble Castillo Vagabundo', entre otras, Miyazaki nos demuestra que su imaginación no tiene límites y que, precisamente, sus historias tocan fibras de chicos y grandes.

    En el caso de 'El Niño y la Garza', Miyazaki nos muestra una historia para cuestionarnos acerca del duelo y cómo es que decidimos seguir adelante

    Una película inspirada en la novela 'How Do You Live?', de Genzaburo Yoshino, Hayao logra llevarnos a un viaje espiritual donde nos preguntaremos acerca de las razones que nos mantienen en la tierra.

    Así pues, ahí te van algunas razones por las que no deberías perderte esta película.

    1. Tiene guiños a otras de sus películas

    Y no es como que esto debiera sorprendernos, ya que lo hemos visto en diferentes ocasiones. Sin embargo, aquí explora un poquito más la historia de Studio Ghibli.

    Las escenas que recuerdan a la cruda 'La Tumba de las Luciérnagas', el viaje místico estilo 'El Viaje de Chihiro' o la determinación de su protagonista tal cual como en 'La Princesa Mononoke'.

    2. No es la historia convencional de una familia, pero sí lo es para la época en la que está situada

    Mahito, el protagonista, debe enfrentarse a una extraña situación en la que, en medio del duelo que vive por perder a su madre en un incendio (todo se sitúa en la Segunda Guerra Mundial), su padre toma como pareja a Natzuko (hermana de su madre), quien está esperando un bebé. 

    Cuando se mudan a una antigua mansión en el pueblo natal de su madre, Mahito se siente como un extraño. No logra hacer amigos y no siente que ese sea su hogar. Sin embargo, se encuentra con una garza gris quien le dice que su madre está viva... y aquí inicia todo.

    3. Cuando la vida no va como lo planeamos ¿qué nos toca hacer?

    En la película podemos notar que Mahito no está 100% cómodo con la situación de tener un nuevo hermano, ni con la idea de una madrastra que luce casi igual a su madre. Aun así, cuando Natzuko se pierde en el castillo prohibido, él parece saber de manera instintiva que lo correcto es ir a salvarla, pues sea como sea, es ahora su nueva familia. 

    4. Los warawaras y las garzas: La vida y la muerte

    En el trayecto de Mahito a este mundo paralelo, descubre a un montón de nuevas criaturas, entre ellas a los wara waras, unas criaturas con forma de globo que, estando bien alimentadas, se inflan para ir al cielo y convertirse en humanos. 

    Sin embargo, en medio del trayecto de los wara waras, llegan inesperadamente cientos de garzas que se las comen. Afortunadamente a su rescate llega Himi (quien es en realidad la madre de Mahito), una niña con poderes de fuego que logra ahuyentar a las garzas (aunque también termina por matar a algunos wara waras). 

    Cuando la trifulca termina, Mahito se encuentra con una garza herida que le pide que termine con su sufrimiento y la mate, pero antes de hacerlo, le cuenta que él y las otras garzas, no tienen el poder suficiente para volar al cielo hacia el otro mundo y entonces deben comer wara waras para no morir. 

    Justo cuando termina de explicarle, la garza fallece y Mahito, en lugar de no darle importancia, honra la muerte de la criatura y la entierra dignamente, lo que demuestra que a pesar de su fascinación por la vida (representada en los pequeños globos), está consciente de que para que exista, también deberá haber muerte.


    4. Miyazaki nos hace reflexionar: No sabemos qué va a pasar mañana, pero sí podemos decidir qué hacer ahora

    En medio de este viaje espiritual, Mahito se encuentra con "El Señor de la Torre", quien es en realidad su tío abuelo quien se perdió años atrás y que ahora es quien observa todos los mundos y tiene la tarea de mantener el balance a través de lo que parecen unas piezas de juguete. 

    A la llegada de Mahito, su tío abuelo le dice que quiere dejar su legado en sus manos, que sea él ahora quien mantenga el equilibrio y el responsable de decidir si el futuro será hermoso o no. 

    Mahito le dice a su tío que no quiere esta enorme responsabilidad, pues sabe que es capaz de tener maldad dentro de él. Aun así, su tío insiste pues sabe que, a pesar de ello, Mahito será capaz de ubicar las piezas donde debe.

    5. Honrar la muerte para seguir con la vida

    Cuando el rey de los periquitos irrumpe en la plática de Mahito y su tío, este se empecina en ser el sucesor de "El Señor de la Torre", toma las piezas y, sin pensar, termina por derrumbarlas, lo que provoca que el mundo espiritual comience a caerse a pedazos. 

    Himi, Mahito, la garza gris y Natzuko huyen hacia las puertas que los llevarán a sus mundos, pero cuando Mahito le pide a Himi que se vaya con ellos, ella le dice que está feliz de que sea su hijo, pero que ahora Natzuko se hará cargo de él y serán muy felices. 

    De esta forma, Mahito comprende que debe despedirse de su madre y que es imposible evitar que cosas como la muerte (o la guerra) sucedan, sin embargo, el mundo sigue estando en sus manos y de él dependerá hacer de este un lugar hermoso para vivirlo. 

    Así como todas las películas de Hayao Miyazaki, 'El Niño y la Garza' es una película compleja y al mismo tiempo conmovedora. Pero si quieres encontrar muchos más significados, no te pierdas su estreno el próximo 28 de diciembre.